En las relaciones de pareja es fundamental saber perder (y saber ganar…).
Hombre y mujer son complementarios, la combinación que se produce en una relación matrimonial o de pareja multiplica exponencialmente las posibilidades, es un enriquecimiento enorme. Si fuéramos iguales, no ganaríamos nada.
Esta diferencia, sin embargo, requiere de un aprendizaje para saber ensamblar las piezas. Cuando la relación es sana, las dos partes están en situación de igualdad, lo que provoca frecuentes diferencias de criterio, gustos, opiniones. Una de las habilidades que permiten gestionar esta variedad de perspectivas y aprovecharla para ir más lejos y ser más felices es saber perder.
G.K. Chesterton, con su habitual humor paradójico, exageraba esta realidad para dar fuerza a sus propuestas:
He conocido muchos matrimonios felices, pero nunca uno compatible. El único fin del matrimonio es luchar y sobrevivir al instante cuando la incompatibilidad se convierte en algo incuestionable. Porque el hombre y la mujer, como tales, son incompatibles (G.K. Chesterton, “Lo que está mal en el mundo”).
Nosotros preferimos hablar de cpmplementariedad, no de incompatibilidad; pero en el fondo, la cuestión es la misma: la relación entre esposos está trufada de frecuentes desencuentros, y esto es absolutamente normal. Lo que hace falta es saber cómo reconducirlos hacia una relación feliz, y aprender a perder, a ceder, es muy útil.
Lola y Javier Callejón de Lara también tiran de humor para ejemplificar esta necesaria lección del perdedor, con una situación casi banal: el juego de «La Oca». Como Chesterton, utilizan la paradoja y muestran un contra ejemplo, que sirve para enseñar también que «saber ganar» ayuda muchísimo y facilita aprender a perder.
Cuando no se logran gestionar bien estos naturales desencuentros y provocan situaciones duraderas de enfado o distanciamiento, conviene acudir a ayuda especializada en terapia de pareja para aprender a perder (y ganar), y a disfrutar y enriquecerse con las diferencias que se complementan y nos enriquecen tanto.